Hageo 2:4-9 La
Biblia de las Américas (LBLA)
Promesa de Dios a Zorobabel
2 El día veintiuno del mes séptimo,
vino la palabra del Señor por medio[a] del
profeta Hageo, diciendo: 2 Habla ahora a
Zorobabel, hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y al sumo sacerdote Josué,
hijo de Josadac, y al remanente del pueblo, diciendo: 3 “¿Quién ha quedado
entre vosotros que haya visto este templo[b] en su
gloria primera? ¿Y cómo lo veis ahora? Tal como está, ¿no es como nada a
vuestros ojos?4 “Pero ahora,
esfuérzate, Zorobabel” —declara el Señor— “esfuérzate tú
también, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, y esforzaos todos vosotros,
pueblo de la tierra” —declara el Señor— “y trabajad, porque
yo estoy con vosotros” —declara el Señor de los
ejércitos. 5 “Conforme a la promesa[c] que os hice[d] cuando
salisteis de Egipto, mi Espíritu permanece[e] en medio
de vosotros; no temáis.” 6 Porque así dice el Señor de los
ejércitos: “Una vez más, dentro de poco[f], yo haré
temblar los cielos y la tierra, el mar y la tierra firme. 7 “Y haré temblar a
todas las naciones; vendrán entonces los tesoros[g] de todas
las naciones, y yo llenaré de gloria esta casa” —dice el Señor de los
ejércitos. 8 “Mía es la plata y
mío es el oro” —declara el Señor de los
ejércitos. 9 “La gloria postrera de
esta casa será mayor que la primera” —dice el Señor de los
ejércitos— “y en este lugar daré paz” —declara el Señor de los
ejércitos.
10 El día veinticuatro
del mes noveno, en el
año segundo de Darío, vino la palabra del Señor al profeta Hageo,
diciendo: 11 Así dice el Señor de los
ejércitos: “Pide ahora instrucción[h] a los
sacerdotes[i]: 12 ‘Si
alguno lleva carne consagrada en la falda[j] de su
vestidura, y toca con su falda[k] pan,
alimento cocido, vino, aceite o cualquier otro alimento, ¿quedará éste consagrado?’” Y los sacerdotes
respondieron, y dijeron: No. 13 Y
dijo Hageo: Si alguno, inmundo por el contacto con un cadáver[l], toca
cualquiera de estas cosas, ¿quedará inmunda? Respondieron los sacerdotes, y
dijeron: Quedará inmunda. 14 Entonces
volvió a hablar Hageo y dijo: “Así es este pueblo y así es esta nación delante
de mí” —declara el Señor— “y así es toda obra
de sus manos; y lo que aquí ofrecen, inmundo es. 15 “Ahora
pues, considerad bien[m] estode hoy en adelante[n]: antes que se
pusiera piedra sobre piedra en el templo del Señor, 16 desde
aquel tiempo[o], venía alguno a un montón de veinte medidas, y había sólo diez; venía alguno al lagar para sacar
cincuenta cántaros, y había sólo veinte. 17 “Os
herí con viento abrasador,
con añublo y con granizo en toda obra de vuestras manos; pero ninguno de
vosotros se volvió a
mí[p]” —declara el Señor. 18 “Pero
considerad bien[q] esto desde hoy en adelante[r], desde el día
veinticuatro del mesnoveno;
desde el día en que se pusieron los cimientos del templo del Señor, considerad bien[s]: 19 “¿Está
todavía la semilla en el granero? Todavía la vid, la higuera, el granado y el
olivo no han dado fruto; perodesde
hoy yo os bendeciré.”
20 Y la palabra del Señor vino por
segunda vez a Hageo, el díaveinticuatro
del mes, diciendo: 21 Habla
a Zorobabel, gobernador de Judá, diciendo: “Yo estremeceré los cielos y la
tierra, 22 y volcaré el trono de
los reinos y destruiré el poder de los reinos de las naciones[t]; y volcaré el
carro y a los que montan en él, y caerán los caballos y sus jinetes, cada uno
por la espada de su hermano. 23 “En
aquel día” —declara el Señor de los
ejércitos— “te tomaré a ti, Zorobabel, hijo de Salatiel, siervo mío” —declara
el Señor— “y te pondré como anillo desello, porque yo te he
escogido” —declara el Señor de los ejércitos.
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
¿Cómo Seguir Los
Pasos de Jesús Según La Biblia?
Publicado por: Cristianos en Preguntas y Respuestas Cristianas, Respuestas Cristianas 0
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¿Cómo Seguir Los Pasos de Jesús Según La Palabra de Dios?
“…PARA QUE SIGÁIS SUS PISADAS” (1 Pedro 2:21)
Si deseas seguir los
pasos de Jesús, observa lo siguiente en Él:
1) Nunca se apresuró
para hacer nada. Ni tomó decisiones coaccionado por las tácticas de presión de
otros.
Los buenos
negociadores son conscientes de que saber esperar es un arma; el que más se
precipita, por lo general acaba con la peor parte. El proceso de espera desvela
los puntos vulnerables de cada plan y los motivos de las personas que te
rodean. La impaciencia será la causante de tus peores errores; por lo tanto,
piensa a largo plazo.
2) Sabía cuándo
trabajar y cuándo descansar.
En la tormenta del Mar de Galilea, los discípulos sudaron la gota gorda faenando mientras que Jesús dormía. En el huerto de Getsemaní, los discípulos dormían y Jesús sudaba. Porque sabía cuándo era pertinente trabajar y cuándo descansar. Para poder hacer la voluntad de Dios y no quemarte, debes aprender el secreto de discernir los momentos de actuar y los de confiar, en qué asuntos debes inmiscuirte y cuáles debes dejar en las manos de Dios.
En la tormenta del Mar de Galilea, los discípulos sudaron la gota gorda faenando mientras que Jesús dormía. En el huerto de Getsemaní, los discípulos dormían y Jesús sudaba. Porque sabía cuándo era pertinente trabajar y cuándo descansar. Para poder hacer la voluntad de Dios y no quemarte, debes aprender el secreto de discernir los momentos de actuar y los de confiar, en qué asuntos debes inmiscuirte y cuáles debes dejar en las manos de Dios.
3) Nadie estaba más
ocupado que Jesús. Todo el mundo lo reclamaba.
Cuanto más éxito tengas, más gente va a querer algo de ti. Jesús se apartó para poder recibir; entendió que no se puede dar de lo que no se tiene. El trabajo es dar, el descanso recibir. Jesús halló el equilibrio y por eso logró hacer tanto en sólo tres años.
Cuanto más éxito tengas, más gente va a querer algo de ti. Jesús se apartó para poder recibir; entendió que no se puede dar de lo que no se tiene. El trabajo es dar, el descanso recibir. Jesús halló el equilibrio y por eso logró hacer tanto en sólo tres años.
Cuando estás
descansado, tu mente se encuentra más despejada y tomas mejores decisiones, ves
la vida con ojos de confianza, rindes más y lo que edificas es duradero. Haz un
alto en medio de tu apresuramiento diario. Para seguir los pasos de Jesús
tienes que ser dirigido, ¡pero no arrastrado!
4) Jesús sabía que no
tenía que demostrarse nada a sí mismo.
Cuando estaba en la cruz, los escépticos decían: “…¡Si eres Hijo de Dios, desciende de la cruz!” (Mateo 27:40). ¿Cuál fue su reacción? No dejó que esos comentarios lo intimidaran ni alteraran sus planes. No necesitaba su aprobación, pues ya tenía la del Padre: “Éste es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia” (Mateo 3:17).
Cuando estaba en la cruz, los escépticos decían: “…¡Si eres Hijo de Dios, desciende de la cruz!” (Mateo 27:40). ¿Cuál fue su reacción? No dejó que esos comentarios lo intimidaran ni alteraran sus planes. No necesitaba su aprobación, pues ya tenía la del Padre: “Éste es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia” (Mateo 3:17).
5) Jesús no perdió el
tiempo contestando a sus detractores:
“Pero Jesús no le respondió ni una palabra, de tal manera que el gobernador estaba muy asombrado” (Mateo 27:14).
“Pero Jesús no le respondió ni una palabra, de tal manera que el gobernador estaba muy asombrado” (Mateo 27:14).
Jesús reaccionó ante
los hambrientos, los necesitados, los que le buscaban, pero no ante los que
querían tenderle trampas.
No les debes nada a los que te critican: “A oídos del necio jamás dirijas palabra, pues se burlará de tus sabios consejos” (Proverbios 23:9 NVI).
No les debes nada a los que te critican: “A oídos del necio jamás dirijas palabra, pues se burlará de tus sabios consejos” (Proverbios 23:9 NVI).
¿Sabes por qué nunca
se ha hecho un monumento a ningún criticón? Porque éstos son espectadores, no
jugadores.
6) Jesús no se centró
en el pasado, sino en el futuro.
Su madre quedó embarazada de Él antes de casarse, pero muy pocas personas sabían la verdad. Jesús conocía esa información, pero no necesitó justificarse. Deja de lamentarte de que tu familia era pobre, o de hablar de la escasa educación que recibiste, o de insistir en contar las historias de los que te fallaron, o de publicar tus sufrimientos o de hacer hincapié en tus carencias.
Su madre quedó embarazada de Él antes de casarse, pero muy pocas personas sabían la verdad. Jesús conocía esa información, pero no necesitó justificarse. Deja de lamentarte de que tu familia era pobre, o de hablar de la escasa educación que recibiste, o de insistir en contar las historias de los que te fallaron, o de publicar tus sufrimientos o de hacer hincapié en tus carencias.
Todo el mundo pasa
por dificultades. “No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a la
memoria las cosas antiguas. He aquí que yo hago cosa nueva…” (Isaías 43:18-19).
A Satanás le encanta
hablar de tu pasado, porque es la única información que posee. Pero Jesús habla
de tu futuro. Si quieres seguir sus pasos, ¡mira hacia adelante!
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
Devocionales
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
Detrás de la codicia…
“Había cierto hombre
llamado Ananías quien, junto con su esposa, Safira, vendió una propiedad; y
llevó solo una parte del dinero a los apóstoles pero afirmó que era la suma
total de la venta. Con el consentimiento de su esposa, se quedó con el resto.
Entonces Pedro le dijo: «Ananías, ¿por qué has permitido que Satanás llenara tu
corazón? Le mentiste al Espíritu Santo y te quedaste con una parte del dinero.
La decisión de vender o no la propiedad fue tuya. Y, después de venderla, el
dinero también era tuyo para regalarlo o no. ¿Cómo pudiste hacer algo así? ¡No
nos mentiste a nosotros sino a Dios!». En cuanto Ananías oyó estas palabras,
cayó al suelo y murió. Todos los que se enteraron de lo sucedido quedaron
aterrados. Después unos muchachos se levantaron, lo envolvieron en una sábana,
lo sacaron y lo enterraron. Como tres horas más tarde, entró su esposa sin
saber lo que había pasado. Pedro le preguntó:
— ¿Fue este todo el
dinero que tú y tu esposo recibieron por la venta de su terreno?
—Sí —contestó ella—,
ese fue el precio.
Y Pedro le dijo:
— ¿Cómo pudieron
ustedes dos siquiera pensar en conspirar para poner a prueba al Espíritu del
Señor de esta manera? Los jóvenes que enterraron a tu esposo están justo afuera
de la puerta, ellos también te sacarán cargando a ti”. Hechos 5:1-9 (NTV)
Ananías y Safira se
dejaron llevar por la ambición y la codicia, lo que en nuestros días se ve con
frecuencia.
Por la ambición se
han cometido crímenes, grandes injusticias y, además, muchos cristianos han
retenido lo que en verdad le pertenece a Dios. Por la codicia muchos hemos sido
víctimas de robos y atracos, problemas a cerca de los cuales leemos diariamente
en los periódicos. Por ello, debemos eliminar esto que se ha convertido en una
plaga en nuestros días.
Muchos hemos visto a
personas que se han esforzado por obtener una buena posición económica y la han
conseguido, no está mal, pero el problema se encuentra en dejarse llevar por la
codicia y la ambición que no sólo hacen que se olviden de Dios, sino que
también los convierte en sus esclavos.
“Porque raíz de todos
los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de
la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.” 1Timoteo 6:10 (RVR 19960)
Si has estado yendo
por el camino que Ananías y Safira eligieron ¡Detente! Dios quiere bendecirte
en gran manera, no te adelantes a este hecho y caigas en las trampas del
enemigo, porque detrás de la codicia está la muerte espiritual y hasta física.
Su bendición no te
llevará a la muerte, sino traerá gozo y paz a tu alma.
Ruth Mamani
CVCLAVOZ
CVCLAVOZ
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