Éxodo 34:12-17 La
Biblia de las Américas (LBLA)
Advertencia contra la idolatría
10 Y Dios contestó: He aquí,
voy a hacer un pacto. Delante de todo tu pueblo haré maravillas que no se han
hecho[e] en toda la tierra ni en ninguna de
las naciones; y todo el pueblo en medio del cual habitas[f]verá la obra del Señor, porque es cosa
temible la que haré por medio de ti. 11 Observa lo que te
mando hoy: he aquí, yo echo de delante de ti al amorreo, al cananeo, al hitita,
al ferezeo, al heveo y al jebuseo.12 Cuídate de no hacer pacto con los habitantes de la tierra adonde
vas, no sea que esto se convierta en tropezadero[g] en medio de ti; 13 sino que
derribaréis sus altares y quebraréis sus pilares sagrados y cortaréis sus Aseras[h] 14 (pues no adorarás a
ningún otro dios, ya que el Señor, cuyo nombre es
Celoso, es Dios celoso) 15 no sea que hagas
pacto con los habitantes de aquella[i] tierra, y cuando se prostituyan con
sus dioses y les[j] ofrezcan sacrificios,
alguien te invite y comas de su sacrificio; 16 y tomes de sus
hijas para tus hijos, y ellas[k] se prostituyan con
sus dioses, y hagan que también tus hijos se
prostituyan con los dioses de ellas. 17 No te harás dioses
de fundición.
18 Guardarás la fiesta
de los panes sin levadura. Según te he mandado, por siete días comerás panes
sin levadura en el tiempo señalado en el mes de Abib, porque en el mes de Abib
saliste de Egipto. 19 Todo primer nacido[l] de matriz me
pertenece, y de todo ganado tuyo, el primer nacido[m] de vaca y de oveja,
que sea macho. 20 Redimirás con una oveja el primer nacido[n] de asno; y si no lo redimes, quebrarás
su cerviz. Redimirás a todo primogénito de tus hijos; y nadie se presentará[o] ante mí con las
manos vacías.
21 Seis días
trabajarás, mas en el séptimo día descansarás; aun en el tiempo de
arar y de segar, descansarás. 22 También celebrarás
la fiesta de las semanas, es decir, los primeros frutos de la siega del trigo, y la fiesta de la
cosecha al final del año. 23 Tres veces al año
se presentarán todos tus varones delante de Dios[p], el Señor, Dios de
Israel. 24 Porque yo expulsaré[q] a las naciones de
tu presencia y ensancharé tus fronteras, y nadie codiciará tu tierra cuando
subas tres veces al año a presentarte delante del Señor tu Dios.
25 No ofrecerás[r] la sangre de mi
sacrificio con pan leudado, ni se dejará nada del sacrificio de
la fiesta de la Pascua hasta la mañana. 26 Traerás a la casa
del Señor tu Dios las
primicias de los primeros frutos de tu tierra. No cocerás el cabrito en la
leche de su madre.
27 Entonces el Señor dijo a Moisés:
Escríbete estas palabras; porque conforme a estas palabras he hecho un pacto contigo y con
Israel. 28 Y Moisés estuvo allí con el Señor cuarenta días y
cuarenta noches; no comió pan ni bebió agua. Y escribió en las tablas las palabras del
pacto, los diez mandamientos[s].
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
¿Cómo Caminar En
Pureza Según La Biblia?
Publicado por: Cristianos en Devocional Diario 0
Publicado por: Cristianos en Devocional Diario 0
LOS AFINARÁ COMO A ORO Y COMO A PLATA (Malaquias 3:3)
¿Cómo Caminar En
Pureza Según La Palabra de Dios?
Cuando se refina el oro con temperaturas muy elevadas, lo primero que sale a la superficie es la escoria. Luego se separa la plata, un metal de menos valor que está mezclado con el mineral de oro. De esto se desprende una enseñanza importante:
Cuando se refina el oro con temperaturas muy elevadas, lo primero que sale a la superficie es la escoria. Luego se separa la plata, un metal de menos valor que está mezclado con el mineral de oro. De esto se desprende una enseñanza importante:
Muchos de nosotros
somos incapaces de separar lo bueno de lo mejor, por eso escribe Malaquías:
“Los afinará como a oro y como a plata” Dios tiene que hacerlo, porque nosotros
no sabemos.
Después de cometer
adulterio con Betsabé, David escribió:
¡Crea en mí, Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí! (Salmo 51:10). David pidió dos cosas:
¡Crea en mí, Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí! (Salmo 51:10). David pidió dos cosas:
1) Un corazón limpio
2) Un espíritu recto
que deseara vivir en pureza.
El fracaso personal
es por lo general el resultado de un proceso lento, pero constante, y no de un
acto aislado de desobediencia.
Este fracaso ocurre cuando ponemos nuestra mente en las cosas indebidas y descuidamos nuestra vida espiritual. Por ello, Dios nos llama a un lugar de soledad, lejos de cualquier distracción, para probar nuestros pensamientos más profundos y abrir nuestros ojos a asuntos que necesitan ser tratados. En ese lugar, Dios nos revela los defectos que excusamos o que intentamos esconder de los demás.
Este fracaso ocurre cuando ponemos nuestra mente en las cosas indebidas y descuidamos nuestra vida espiritual. Por ello, Dios nos llama a un lugar de soledad, lejos de cualquier distracción, para probar nuestros pensamientos más profundos y abrir nuestros ojos a asuntos que necesitan ser tratados. En ese lugar, Dios nos revela los defectos que excusamos o que intentamos esconder de los demás.
Es ahí donde se
filtra todo el polvo que se nos ha pegado durante las ocupaciones del día.
Cuando nos libramos de esa basura, podemos ver las cosas con más claridad y
responder a los toques divinos. Sin disciplina no podremos tener una relación
más íntima y profunda con el Señor.
Dice el apóstol
Santiago: Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros, limpiad las manos y
purificad vuestros corazones (Santiago 4:8).
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
Devocionales
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
El veredicto.
Se cuenta que en la
Edad Media un hombre muy íntegro fue injustamente acusado de haber asesinado a
una mujer. El verdadero autor del crimen era una persona muy influyente del
reino y, por lo tanto, desde el primer momento se buscó un “chivo expiatorio” para
encubrir al culpable.
El hombre fue llevado
a juicio ya conociendo que tendría pocas o nulas esperanzas de escapar a la
terrible sentencia: ¡La horca!
El juez, quien
también había sido comprado, cuidó los detalles para dar todo el aspecto de un
juicio justo, por ello dijo al acusado:
- Conociendo tu fama
de hombre justo y devoto del Señor, vamos a dejar en manos de Él tu destino:
Vamos a escribir en dos papeles separados las palabras ‘culpable’ e ‘inocente’.
Tú escogerás y será la mano de Dios la que decida tu destino.
Por supuesto, el mal
funcionario había preparado dos papeles con la misma leyenda: ‘CULPABLE’ y la
pobre víctima, aún sin conocer los detalles, se daba cuenta que el sistema
propuesto era una trampa. No había escapatoria.
El juez ordenó al hombre
tomar uno de los papeles doblados. Éste respiró profundamente, quedó en
silencio unos cuantos segundos con los ojos cerrados, y cuando la sala
comenzaba ya a impacientarse, abrió los ojos y con una extraña sonrisa, tomó
uno de los papeles y llevándolo a su boca, lo tragó rápidamente.
Sorprendidos e indignados, los presentes le reprocharon:
Sorprendidos e indignados, los presentes le reprocharon:
- Pero, ¿qué hizo?, y
ahora ¿cómo vamos a saber el veredicto?.El hombre respondió tranquilamente:
- Es muy sencillo, es
cuestión de leer el papel que queda, y sabremos lo que decía el que me tragué.
Con un gran coraje disimulado, tuvieron que liberar al acusado y jamás volvieron a molestarlo.
Con un gran coraje disimulado, tuvieron que liberar al acusado y jamás volvieron a molestarlo.
Así como este hombre
se vio envuelto en una trampa de la que aparentemente no había salida, muchas
veces nosotros también sufrimos injusticias y no falta la oportunidad en la que
nuestra fe flaquea y sentimos que no podemos más. Pero Dios nunca nos abandona
y hace justicia a favor de los rectos y humildes de corazón, de aquellos que lo
buscan.
“Pues el Señor es
nuestro juez, nuestro legislador y nuestro rey; él cuidará de nosotros y nos
salvará”. Isaías 33:22
Sin importar el
problema por el que estés pasando, si has sido acusado falsamente, si ves cómo
los demás se valen de cosas deshonestas para lograr un fallo a su favor, no temas,
busca a Dios en oración, Él siempre está atento a las oraciones de los justos y
obra a su favor, no te fallará.
“Él hará resplandecer
tu inocencia como el amanecer, y la justicia de tu causa brillará como el sol
de mediodía”. Salmos 37:6
Ana María Frege Issa
CVCLAVOZ
CVCLAVOZ