lunes, 26 de marzo de 2018

JOB 3:20 LAMENTOS DE JOB - LA JUSTIFICACION - USTED ES JUSTO ! - ESPERAR NO ES VANO

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Job 3:20  La Biblia de las Américas (LBLA)

Lamentos de Job

Después abrió Job su boca y maldijo el día de su nacimiento[a]. Y Job dijo[b]:
Perezca el día en que yo nací,
y la noche que dijo: “Un varón ha sido concebido.”
Sea ese día tinieblas,
no lo tome en cuenta Dios desde lo alto,
ni resplandezca sobre él la luz.
Apodérense de él tinieblas y densa oscuridad,
pósese sobre él una nube,
llénelo de terror la negrura del día.
Y en cuanto a aquella noche, apodérense de ella las tinieblas;
que no se alegre entre los días del año,
ni se cuente en el número de los meses.
He aquí, sea estéril aquella noche,
no entren en ella gritos de júbilo.
Maldíganla los que maldicen el día,
los que están listos[c] para despertar a Leviatán[d].
Oscurézcanse las estrellas de su alba;
que espere la luz mas no la tenga,
que tampoco vea el rayar[e] de la aurora;
10 porque no cerró las puertas[f] del vientre de mi madre,
ni escondió la aflicción de mis ojos.
11 ¿Por qué no morí yo al nacer[g],
o expiré al salir del vientre?
12 ¿Por qué me recibieron las rodillas,
y para qué los pechos que me dieron de mamar?
13 Porque ahora yo yacería tranquilo;
dormiría, y entonces tendría descanso
14 con los reyes y los consejeros de la tierra,
que reedificaron ruinas para sí;
15 o con príncipes que tenían oro,
que llenaban sus casas de plata.
16 O como aborto desechado[h], yo no existiría,
como los niños que nunca vieron la luz.
17 Allí los impíos cesan de airarse,
y allí reposan los cansados[i].
18 Juntos reposan los prisioneros;
no oyen la voz del capataz.
19 Allí están los pequeños y los grandes,
y el esclavo es libre de su señor.
20 ¿Por qué se da luz al que sufre,
y vida al amargado de alma;
21 a los que ansían[j] la muerte, pero no llega[k],
y cavan por ella más que por tesoros;
22 que se alegran sobremanera,
y se regocijan cuando encuentran el sepulcro?
23 ¿Por qué dar luz al hombre cuyo camino está escondido,
y a quien Dios ha cercado?
24 Porque al ver mi alimento salen mis gemidos,
y mis clamores se derraman como agua.
25 Pues lo que temo[l] viene sobre mí,
y lo que me aterroriza me sucede.
26 No tengo reposo ni estoy tranquilo,
no descanso, sino que me viene turbación.



UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

REFLEXION
LA JUSTIFICACION – USTED ES JUSTO !
Publicado por: Pastor Carlos Vargas Valdez en Cristianos, Devocional Cristiano, Devocional Diario, Devocionales, Dios 0

LA JUSTIFICACION ES DE DIOS – USTED ES JUSTO
Y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe. Filipenses 3:9
No importa lo mucho que haya echado a perder las cosas ni cuántos errores haya cometido, usted debe empezar este día convencido de que es justo. No porque usted haya hecho algo para justificarse, sino porque ya recibió, por la fe en Cristo, la justicia de Dios.
Considere algunos de los beneficios que según la Palabra de Dios vienen con la justicia:
“El justo florecerá como la palmera” (Salmos 92:12).
“En el bien de los justos la ciudad se alegra” (Proverbios 11:10).
“… la descendencia de los justos será librada” (Proverbios 11:21).
“Porque los ojos del Señor están sobre los justos, y sus oídos atentos a sus oraciones” (1 Pedro 3:12).
“Porque tú, oh Jehová, bendecirás al justo; como con un escudo lo rodearás de tu favor” (Salmos 5:12).
“Claman los justos, y Jehová oye, y los libra de todas sus angustias” (Salmos 34:17).
“Joven fui, y he envejecido, y no he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan” (Salmos 37:25).
“Los justos heredarán la tierra, y vivirán para siempre sobre ella” (Salmos 37:29).
“Jehová ama a los justos” (Salmos 146:8).
Para que el diablo no le arrebate ninguna de esas bendiciones, no le haga caso cuando le diga que usted no merece ninguna de ellas. Hágalo huir, diciéndole: “He sido hecho justicia de Dios en Cristo”. Luego, empiece a disfrutar, por la fe, los privilegios que Dios le ha preparado.
Escritura Devocional para leer: Filipenses 3:9
Y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe.





UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

REFLEXION
Devocionales
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ

Esperar no es vano.
“Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos.” Salmos 40:2 (RVR1960)
Antiguamente, cuando un pozo de agua se secaba era utilizado como prisión y si quedaba algo de humedad en el fondo, se formaba lodo, por lo cual el piso se hacía muy inestable para el preso, que veía como lentamente se hundía cada vez más. A esto le sumamos el frío que debía soportar, podemos concluir que se trataba de un castigo insoportable.
Cuando estamos en una situación difícil a veces sentimos que nos estamos ‘hundiendo’ y cuanto más pensamos en la dificultad, nos hundimos más, llegándonos a sentir que no hay manera alguna de salir.
Sabemos que cuando cometemos un pecado, la conciencia no nos deja tranquilos y de alguna forma nuestro rostro se inclina al piso, sintiendo vergüenza delante de Dios. En tal sentido el Rey David se expresa: “Porque me han rodeado males sin número; Me han alcanzado mis maldades, y no puedo levantar la vista.” Salmos 40:12 (RVR1960) esas son las palabras honestas de un creyente que está luchando contra el pecado.
Una de las claves que David usó para superar este tiempo difícil fue: esperar “Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor.” Salmos 40:1 (RVR1960), Cuando estamos en situaciones difíciles, queremos que Dios nos ayude inmediatamente, para evitar el problema, la angustia y el dolor. Pero, muchas veces tenemos que esperar, porque en medio del sufrimiento, Dios quiere enseñarnos lecciones importantes.
David, reconoció que sus maldades lo alcanzaron y lo llevaron a un pozo de desesperación, pero su corazón estaba centrado en Dios, confiando en Él. Por eso aprendió a esperar con paciencia; no se desesperó. Él también clamó y finalmente afirmó: “Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí. Mi ayuda y mi libertador eres tú; Dios mío, no te tardes.” Verso 17. “y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado.” Romanos 5:4-5 (RVR1960)
La espera vale la pena, porque Dios mismo toma control para solucionar situaciones que nosotros no podemos y también para ayudarnos a sobrellevar las consecuencias de nuestros propios errores.
Aunque resulte difícil, confía que esperar no es en vano.
¡Dios te sacará del pozo de la angustia!
Soraida Fuentes
CVCLAVOZ





viernes, 23 de marzo de 2018

GENESIS 42:21 LOS HERMANOS DE JOSE VAN A EGIPTO - ¿ QUE DICE LA BIBLIA SOBRE EL JURAR,...........- ¿ CUAL ES TU PERSPECTIVA?



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Génesis 42:21  La Biblia de las Américas (LBLA)

Los hermanos de José van a Egipto

42 Viendo Jacob que había alimento[a] en Egipto, dijo[b] a sus hijos: ¿Por qué os estáis mirando? Y dijo: He aquí, he oído que hay alimento[c] en Egipto; descended allá, y comprad de allí un poco para nosotros, para que vivamos y no muramos. Entonces diez hermanos de José descendieron para comprar grano en Egipto. Pero a Benjamín, hermano de José, Jacob no lo envió con sus hermanos, porque dijo: No sea que le suceda algo malo. Y fueron los hijos de Israel con los que iban a comprar grano, pues también había hambre en la tierra de Canaán. Y José era el que mandaba en aquella[d] tierra; él era quien vendía a todo el pueblo de la tierra. Y llegaron los hermanos de José y se postraron ante él rostro en tierra. Cuando José vio a sus hermanos, los reconoció, pero fingió no conocerlos y les habló duramente. Y les dijo: ¿De dónde habéis venido? Y ellos dijeron: De la tierra de Canaán para comprar alimentos.
José había reconocido a sus hermanos, aunque ellos no lo habían reconocido. José se acordó de los sueños que había tenido[e] acerca de ellos, y les dijo: Sois espías; habéis venido para ver las partes indefensas de nuestra tierra[f]. 10 Entonces ellos le dijeron: No, señor mío, sino que tus siervos han venido para comprar alimentos. 11 Todos nosotros somos hijos de un mismo padre[g]; somos hombres honrados, tus siervos no son espías. 12 Pero él les dijo: No, sino que habéis venido para ver las partes indefensas de nuestra tierra[h]. 13 Mas ellos dijeron: Tus siervos son doce hermanos, hijos del mismo padre[i] en la tierra de Canaán; y he aquí, el menor está hoy con nuestro padre, y el otro[j] ya no existe. 14 Y José les dijo: Es tal como os dije[k]: sois espías. 15 En esto seréis probados; por vida de Faraón que no saldréis de este lugar a menos que vuestro hermano menor venga aquí. 16 Enviad a uno de vosotros y que traiga a vuestro hermano, mientras vosotros quedáis presos, para que sean probadas vuestras palabras, a ver si hay verdad en vosotros. Y si no, ¡por vida de Faraón!, ciertamente sois espías. 17 Y los puso a todos juntos bajo custodia por tres días.
18 Y José les dijo al tercer día: Haced esto y viviréis, pues yo temo a Dios: 19 si sois hombres honrados, que uno de vuestros hermanos quede encarcelado en vuestra prisión[l]; y el resto de vosotros, id, llevad grano para el hambre de vuestras casas; 20 y traedme a vuestro hermano menor, para que vuestras palabras sean verificadas, y no moriréis. Y así lo hicieron. 21 Entonces se dijeron el uno al otro: Verdaderamente somos culpables en cuanto a nuestro hermano, porque vimos la angustia de su alma cuando nos rogaba, y no lo escuchamos, por eso ha venido sobre nosotros esta angustia. 22 Y Rubén les respondió, diciendo: ¿No os dije yo[m]: “No pequéis contra el muchacho” y no me escuchasteis? Ahora hay que rendir cuentas por su sangre[n]. 23 Ellos, sin embargo, no sabían que José los entendía, porque había un intérprete entre él y ellos. 24 Y se apartó José de su lado y lloró. Y cuando volvió a ellos y les habló, tomó de entre ellos a Simeón, y lo ató a la vista de sus hermanos[o].


UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

REFLEXION
¿Que Dice La Biblia Sobre El Jurar, Juramentos y Los Votos?
Publicado por: Pastor Carlos Vargas Valdez en Preguntas y Respuestas Cristianas, Respuestas Cristianas 0

¿Qué dice la Biblia Acerca De Los juramentos, El Jurar, promesas y Los Votos?
¿No prohíbe la Biblia jurar o prestar juramento? ¿Por qué lo hicieron en el Antiguo Testamento?
Juramentos del Antiguo Testamento
Desde que Jesús dijo:
“Pero yo os digo: No juréis en ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios;” (Mt 5:34), y Santiago medio hermano de Jesús escribió:
“Pero sobre todo, hermanos míos, no juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni por ningún otro juramento; sino que vuestro sí sea sí, y vuestro no sea no, para que no caigáis en condenación.”(Santiago 5:12), así que veo que nosotros como cristianos no deberíamos jurar por nada, pero, ¿por qué hay juramentos en el Antiguo Testamento? ¿No es el acto de un juramento pecaminoso, como hemos leído?
En primer lugar, el Antiguo Testamento tiene docenas de referencias de hombres haciendo votos, pero ¿un voto (promesa) y un juramento son lo mismo?
Jurar implica poner por testigo a alguien para asegurar con ello el fiel cumplimiento de un compromiso, generalmente se jura por un poder divino o un por un poder humano o institucional; jurar sobre la Biblia o la Constitución, por ejemplo. Mientras que prometer (hacer un voto) decir la verdad o cumplir fielmente un cargo es un compromiso consigo mismo que adquiere el que jura, sin poner por testigo a nadie ni a nada. Un compromiso personal con algo, con un cargo, una causa, un deber. Un voto o un juramento en el antiguo testamento era la vida para quien lo cumplia, y la muerte para quien lo quebrara.
No Jurar
El Antiguo Testamento Dios hablándole a Israel, dice:
“A Jehová tu Dios temerás, y a él solo servirás, y por su nombre jurarás” (Dt 6:13). Es por eso que nuestra iglesia no jura como testigos porque no podemos jurar por el nombre de Dios, porque no hay nadie más grande. Sin embargo, Dios habló por medio del profeta Jeremías, y dijo:
“Si te volvieres, oh Israel, dice Jehová, vuélvete a mí. Y si quitares de delante de mí tus abominaciones, y no anduvieres de acá para allá, 2 y jurares: Vive Jehová, en verdad, en juicio y en justicia, entonces las naciones serán benditas en él, y en él se gloriarán.” (Jer 4:1-2).
¿Se contradicen estos dos versículos bíblicos?
No, porque Jesús, refiriéndose al período del Antiguo Testamento, dijo:
“Además habéis oído que fue dicho a los antiguos: No perjurarás, sino cumplirás al Señor tus juramentos. 34 Pero yo os digo: No juréis en ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios; 35 ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey.
36 Ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer blanco o negro un solo cabello. 37 Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que es más de esto, de mal procede.”(Mateo 5:33-37).
Claramente, tanto el Antiguo Testamento como el Nuevo Testamento se prohíben los juramentos, especialmente usando el nombre de Dios.
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¿Qué Dice La Biblia Sobre El Jurar, Juramentos y Los Votos?
Jesús siempre estaba contrastando lo antiguo con lo nuevo, y durante su ministerio terrenal, Él estaba presentando a su esposa (su iglesia), pero los líderes religiosos todavía llevaban odres viejos para entenderlo. Jesús dijo a las multitudes:
“Además habéis oído que fue dicho a los antiguos: No perjurarás, sino cumplirás al Señor tus juramentos”. Pero yo os digo: No juréis en ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios”(Mt 5:33-34).
Hablando de lo “antiguo“, podría haber estado refiriéndose a Jefté o a cualquier otro hecho similar donde la gente hacía votos en el Antiguo Testamento. De cualquier manera, Jesús dijo que no deberíamos hacerlo. Por eso Santiago nos dice:
“No juréis, ni por el cielo ni por la tierra ni por ningún otro juramento, sino que vuestro “sí ” sea sí y vuestro “no”sea no, para que no caigáis en condenación” (Santiago 5:12). Santiago está diciendo lo que dice Jesús. Sólo di sí o no y déjalo así.
No hay necesidad de jurar que harás o no harás algo. Jesús quería que dijéramos:“Sí” o “No” (Mt 5:37). ¿Por qué? Porque “todo lo que es más que esto viene del mal” (Mateo 5:37). Usted o yo no podemos “hacer que un pelo sea blanco o negro” (Mt 5:36), ¿por qué prometer o jurar para hacerlo?
Conclusión
Hace muchos años, fui testigo en un tribunal de justicia, y también me he sentado en varios jurados, pero ni una vez he jurado para decir la verdad. Le dije al juez que afirmó que lo que digo es verdad, y el juez aceptó.
Recuerdo a un amigo que tenía que jurar para su graduación en la fuerzas armadas. Día y noche se debatía con la idea de jurar en público, debido a que entendía que no debía hacerse. Así que cuando llegó el momento de Jurar, él dijo: ¡SÍ URO! en vez de ¡Sí Juro! Una anécdota un poco graciosa (válida), pero que no podía dejar de lado.
La Biblia enseña que no debemos jurar, ni siquiera en un tribunal de justicia. Es Dios a quien debemos obedecer más que al hombre (Hechos 5:29). Todo lo que debemos hacer es decir “Sí” o “No” (Mt 5:37). Nada menos… nada más, porque “nada más que esto viene del mal” (Mat 5:37).





UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

REFLEXION
Devocionales
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ

¿Cuál es tu perspectiva?
Hace un tiempo leí un relato de un matrimonio, en el que comentaban sobre cómo veía cada uno el orden. Para la esposa era importante mantener cada cosa en su lugar, para el esposo era irrelevante. Sin darse cuenta, llegó un momento en el que este aspecto influía en cómo enfrentaba cada uno su día, hasta que lo hablaron y tomaron una decisión: cambiar de perspectiva. La esposa no dejaría que el desorden que causaba su esposo la aleje de sus actividades y de aquello que era más importante, por su parte el esposo tuvo que aprender a ser más organizado.
Lo mismo suele suceder en nuestra vida, en las decisiones, actividades y responsabilidades que a diario enfrentamos, en cómo nos vemos a nosotros mismos y a las personas que están en nuestro entorno, solemos ver sólo un lado de las cosas, creyendo que no hay más opción.
Si pudiéramos vernos a nosotros mismos a través de la mirada del Señor, ¿qué veríamos?
¿A una persona sin valor, sin cualidades, llena de defectos y que no tiene voluntad, o por el contrario, a alguien que tiene mucha valía, que aunque no sea perfecto se esfuerza por dar lo mejor de sí, y que es inmensamente amado por Dios?
“Tú creaste las delicadas partes internas de mi cuerpo y me entretejiste en el vientre de mi madre. ¡Gracias por hacerme tan maravillosamente complejo! Tu fino trabajo es maravilloso, lo sé muy bien.” Salmos 139:13-14 (NTV).
Nadie mejor que Dios para mostrarnos una perspectiva diferente a la que estamos acostumbrados, pidamos a nuestro Creador que nos ayude a vernos como Él nos ve, y también que logremos ver a nuestros familiares y seres queridos a través de Su mirada.

Cesia Serna
CVCLAVOZ