Deuteronomio 10:18 La Biblia de
las Américas (LBLA)
Lo que Dios requiere
12 Y ahora, Israel, ¿qué requiere de ti el Señor tu Dios, sino
que temas[c] al Señor tu Dios, que
andes en todos sus caminos, que le ames y que sirvas al Señor tu Dios con
todo tu corazón y con toda tu alma, 13 y que guardes los mandamientos del Señor y sus
estatutos que yo te ordeno hoy para tu bien?14 He aquí, al Señor tu Dios
pertenecen los cielos y los cielos de los cielos, la tierra y todo lo que en
ella hay. 15 Sin embargo, el Señor se agradó de
tus padres, los amó, y escogió a su descendencia[d] después de ellos, es decir, a vosotros, de entre todos
los pueblos, como se ve hoy. 16 Circuncidad, pues, vuestro corazón[e], y no endurezcáis más vuestra cerviz. 17 Porque el Señorvuestro Dios es
Dios de dioses y Señor de señores, Dios grande, poderoso y temible que no
hace acepción de personas ni acepta soborno. 18 El hace justicia al huérfano y a la viuda, y muestra su amor al
extranjero[f] dándole pan y vestido. 19 Mostrad, pues, amor al extranjero, porque vosotros fuisteis
extranjeros en la tierra de Egipto. 20 Temerás al Señor tu Dios; le
servirás, te allegarás[g] a El y sólo en su nombre jurarás. 21 El es el objeto de tu
alabanza y El es tu Dios, que ha hecho por ti estas cosas grandes y portentosas
que tus ojos han visto. 22 Cuando tus padres descendieron a Egipto eran setenta personas, y ahora
el Señor tu Dios te ha
hecho tan numeroso como las estrellas del cielo.
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
Devocionales
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
La voluntad del Padre.
“No todo el que me
llama: “¡Señor, Señor!” entrará en el reino del cielo. Solo entrarán aquellos
que verdaderamente hacen la voluntad de mi Padre que está en el cielo. El día
del juicio, muchos me dirán: “¡Señor, Señor! Profetizamos en tu nombre, expulsamos
demonios en tu nombre e hicimos muchos milagros en tu nombre”. Pero yo les
responderé: “Nunca los conocí. Aléjense de mí, ustedes, que violan las leyes de
Dios”.” Mateo 7:21-23 (NTV)
En este pasaje
bíblico Jesús explica claramente que no todo aquel que le llame Señor entrará
al reino de los cielos, sino aquel que hace la voluntad del Padre. Esto quiere
decir que al cielo no vamos a entrar por obras, ni por ser buenos, sino por
hacer la voluntad de Dios.
Esto no quiere decir
que es en vano que vayas a la iglesia, que le sirvas en algún ministerio, que
salgas a evangelizar o que trabajes para el Señor en algún área, desde luego
que no. Si lo estás haciendo te felicito y animo a continuar en la obra de
Dios.
Lo que quiero
transmitir es que tu prioridad siempre debe ser hacer la voluntad del Padre,
porque hay personas que aparentemente están haciendo la obra de Señor, pero lo
que los motiva o impulsa es el beneficio que encuentran para ellos mismos; es
decir, que no lo hacen para agradar a Dios sino al hombre.
Por eso es importante
que te preguntes y examines como lo hacía el rey David. “Enséñame a hacer tu
voluntad, porque tú eres mi Dios; tu buen espíritu me guíe a tierra de
rectitud.” Salmos 143:10.
En algún momento dije
que David es uno de los hombres que más admiro de la Biblia, porque a pesar de
que tuvo muchos errores en su vida, supo reconocer los mismos, arrepentirse y
buscar a Dios. En alguna oportunidad dijo: “Dios mío, mira en el fondo de mi corazón,
y pon a prueba mis pensamientos. Dime si mi conducta no te agrada, y enséñame a
vivir como quieres que yo viva.” Salmos 139:23-24 (TLA)
Simplemente, con esta
oración, lo que David estaba haciendo era buscar la voluntad de Dios y tratar
de agradarle en todo. Su prioridad siempre fue Dios y guardar sus enseñanzas.
“Dios mío, cumplir tu voluntad es mi más grande alegría; ¡tus enseñanzas las
llevo muy dentro de mí!” Salmos 40:8 (TLA)
Toma un momento para
examinarte y preguntarte: ¿Lo que estoy haciendo es la voluntad de Dios para mi
vida? ¿Le agrada a Dios mi forma de actuar? ¿Qué debo mejorar o cambiar para
hacer la voluntad del Señor?
“No imiten las
conductas ni las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los
transforme en personas nuevas al cambiarles la manera de pensar. Entonces
aprenderán a conocer la voluntad de Dios para ustedes, la cual es buena,
agradable y perfecta.” Romanos 12:2 (NTV).
Diego Jora
CVCLAVOZ
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
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Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
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Salva a tu hermano…
Hace poco una noticia
conmovió muchísimo a toda la población de la ciudad en la que vivo. Oscar, un
hombre con discapacidad múltiple, de escasos recursos económicos, cuida a su
padre de 82 años y alega que lo poco que obtiene lo invierte en la alimentación
de su progenitor, aunque muchas veces se ha quedado sin alimento.
A pesar de las
diferentes limitaciones que este hijo presenta, es alguien ejemplar cuidando a
su padre y siendo el sostén de su casa; a diferencia de muchos casos de la
actualidad donde los hijos prefieren abandonar a sus padres por ser ancianos y
no asumen ninguna responsabilidad. Fue por este motivo que diferentes personas
se compadecieron y fueron a apoyar a esta familia.
Lamentablemente
muchas personas necesitan el apoyo de alguien que pueda ayudarles a salir
adelante; no se necesita ser millonario para ayudar, simplemente un corazón
dispuesto que entregue amor y tiempo, así como sucedió con un paralítico en la
Biblia:
“Entonces, entrando
Jesús en la barca, pasó al otro lado y vino a su ciudad. Y sucedió que le
trajeron un paralítico, tendido sobre una cama; y al ver Jesús la fe de ellos,
dijo al paralítico: Ten ánimo, hijo; tus pecados te son perdonados.” Mateo
9:1-2 (RVR 1690)
Jesús estaba pasando
por la ciudad y trajeron delante de Él a un hombre imposibilitado de poder
caminar, la Biblia no es clara con respecto a quiénes eran los que llevaron al
hombre para que reciba sanidad, pero lo que sabemos es que eran personas que se
compadecieron y quisieron hacer algo por él.
“Y él nos ha dado este
mandamiento: el que ama a Dios, ame también a su hermano.” 1 Juan 4:21 (NVI)
El amor a Dios se
mostrará en el amor al prójimo, no consiste en ir a una iglesia solamente, sino
en tener la compasión y el amor de Cristo ¿Estás dispuesto a apoyar a alguien
que lo necesita?
Te animo a mirar a tu
alrededor y buscar al necesitado, invítalo a la iglesia, ora por su vida y si
está en tus posibilidades responde a su necesidad, te aseguro que Dios te
devolverá multiplicado.
Shirley Chambi
CVCLAVOZ
CVCLAVOZ
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