Hechos 14:17 La
Biblia de las Américas (LBLA)
Pablo y Bernabé en Listra
8 Y había en
Listra un hombre que estaba
sentado, imposibilitado de los pies, cojo desde el seno de su madre y que nunca había andado. 9 Este escuchaba hablar a Pablo, el cual, fijando la mirada en él, y
viendo que tenía fe para ser sanado[e], 10 dijo con fuerte voz: Levántate derecho sobre tus pies. Y él dio un
salto y anduvo. 11 Cuando la multitud vio lo que Pablo había hecho, alzaron la voz,
diciendo en el idioma de Licaonia: Los dioses se han hecho semejantes a hombres y
han descendido a nosotros. 12 Y llamaban a Bernabé, Júpiter[f], y a Pablo, Mercurio[g], porque éste era el que dirigía la palabra. 13 Y el sacerdote de Júpiter, cuyo templo estaba en las afueras de[h] la ciudad, trajo toros y guirnaldas a
las puertas, y quería ofrecer sacrificios juntamente con la multitud. 14 Pero cuando lo oyeron los apóstoles Bernabé y Pablo, rasgaron
sus ropas y se lanzaron en medio de la multitud, gritando 15 y diciendo: Varones, ¿por qué hacéis estas cosas? Nosotros también
somos hombres de igual naturaleza que vosotros, y os anunciamos el evangelio para
que os volváis de estas cosas vanas[i] a un Dios vivo, que hizo el cielo, la tierra, el mar, y todo lo que en
ellos hay; 16 el cual en las generaciones pasadas permitió que todas las naciones[j] siguieran sus propios caminos; 17 y sin embargo, no dejó de dar testimonio de sí mismo, haciendo
bien y dándoos lluvias del cielo y estaciones fructíferas, llenando vuestros
corazones de sustento y de alegría. 18 Y aun diciendo
estas palabras, apenas pudieron impedir que las multitudes les ofrecieran
sacrificio.
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
Incúlcaselas
Continuamente a Tus Hijos. Deuteronomio 6:7 NVI
Publicado por: Cristianos en Los Cristianos 0
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INCÚLCASELAS CONTINUAMENTE A TUS HIJOS Deuteronomio 6:7 NVI.
Abraham tuvo un
sobrino llamado Lot que triunfó en los negocios pero perdió su familia. Las
razones fueron:
a) tuvo una escala de
valores equivocada, colocando las ganancias materiales por encima del éxito
espiritual;
b) estuvo en el entorno equivocado –pensó que sus hijos podrían vivir en Sodoma sin ser afectados por la ciudad;
c) tuvo las expectativas equivocadas -pensó que podría cambiar su entorno transigiendo en sus principios;
d) dio mal ejemplo –pensó que su familia seguiría sus instrucciones; pero lo que hicieron fue imitar su estilo de vida;
e) se relacionó con las personas equivocadas – no se dio cuenta, hasta que fue demasiado tarde, de lo que Sodoma había influido en su familia (véase Génesis 19:4-5).
Si crees que puedes vivir según las reglas del mundo y esperar que tus hijos sigan las de Dios, te está engañando a ti mismo.
En lugar de predicar sobre cómo quieres que se comporten tus hijos, compórtate tú así.
b) estuvo en el entorno equivocado –pensó que sus hijos podrían vivir en Sodoma sin ser afectados por la ciudad;
c) tuvo las expectativas equivocadas -pensó que podría cambiar su entorno transigiendo en sus principios;
d) dio mal ejemplo –pensó que su familia seguiría sus instrucciones; pero lo que hicieron fue imitar su estilo de vida;
e) se relacionó con las personas equivocadas – no se dio cuenta, hasta que fue demasiado tarde, de lo que Sodoma había influido en su familia (véase Génesis 19:4-5).
Si crees que puedes vivir según las reglas del mundo y esperar que tus hijos sigan las de Dios, te está engañando a ti mismo.
En lugar de predicar sobre cómo quieres que se comporten tus hijos, compórtate tú así.
Sé un modelo a
seguir.
Además de tu
influencia como padre o madre, las cuatro influencias mayores en la vida de tus
hijos son los compañeros, la internet, los medios de comunicación y la música.
Y en tus manos está el que esas cosas pesen más que tú o al revés. Tal vez
digas:
“Estoy muy ocupado
ahora” ¡Pues desocúpate! Replantéate tu escala de prioridades. El carácter de
tu hijo se está forjando a diario; la pregunta es ¿quién lo forja?
La Palabra de Dios
determina que hay seis cosas que describen tu trabajo como padre o madre:
1) Enséñales
(Deuteronomio 6:6-7).
2) Capacítalos (Proverbios 22:6).
3) Provee para ellos (2 Corintios 12:14).
4) Críalos (Efesios 6:4).
5) Disciplínalos (1 Timoteo 3:4).
6) Ámalos (Tito 2:4). ¡No existe mayor responsabilidad!
2) Capacítalos (Proverbios 22:6).
3) Provee para ellos (2 Corintios 12:14).
4) Críalos (Efesios 6:4).
5) Disciplínalos (1 Timoteo 3:4).
6) Ámalos (Tito 2:4). ¡No existe mayor responsabilidad!
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
Devocionales
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
Criminal.
En una clase que
recibí de crecimiento espiritual, el educador mostró una carta con la consigna
de que hiciéramos con ella todo lo que desearíamos hacer a nuestro enemigo. El
sobre fue pasando uno por uno y cada cual hacía algo desagradable como
arrugarlo y hasta pisotearlo. Finalmente llegó a manos del instructor quien
abrió la carta y reveló que dentro estaba escrito el nombre de Jesús.
Es primordial
comprender que siempre que dañemos a nuestro hermano lastimaremos también a
Jesús. La Palabra de Dios dice:
“Oísteis que fue
dicho a los antiguos: No matarás; y cualquiera que matare será culpable de
juicio. Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será
culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, a su hermano, será culpable
ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto al infierno
de fuego.” Mateo 5: 21-22 (RVR 1960)
¿Alguna vez has asesinado?
La Biblia dice que aquel que se enoja o insulta a su hermano recibirá el mismo
juicio que un homicida. Por tanto, si crees que eres libre de esta acusación,
es fundamental que examines si estás enojado con alguien.
La realidad es que
todos en algún momento de nuestras vidas hemos ofendido o nos hemos enfadado
con alguien, porque es más fácil enojarse y herir al otro que solucionar el
conflicto, entonces ¿qué haremos para estar aprobados por Dios?.
“Por tanto, si traes
tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti,
deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu
hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda.” Mateo 5:23-24
La Palabra del Señor
es clara con respecto a lo que debemos hacer: “anda, reconcíliate primero con
tu hermano” Si estás en conflicto con alguien porque quizá te han lastimado con
insultos u otras actitudes, aunque consideres que el otro tiene la mayor parte
de la culpa, es preciso “Reconciliarte”, pedir perdón y enterrar el pasado, de
lo contrario tu relación con Dios será la que estará en problemas.
Recuerda: al dañar a
tu enemigo puedes lastimar a Jesús.
Shirley Chambi
CVCLAVOZ
CVCLAVOZ
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