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Salmos 63:5 La Biblia de
las Américas (LBLA)
El alma sedienta se satisface en Dios
Salmo de David,
cuando estaba en el desierto de Judá[a].
63 Oh Dios, tú eres mi Dios; te buscaré con afán[b].
Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela[c]
cual[d] tierra seca y árida donde no hay agua.
2 Así te contemplaba en el santuario,
para ver tu poder y tu gloria.
3 Porque tu misericordia es mejor que la vida,
mis labios te alabarán.
4 Así te bendeciré mientras viva,
en tu nombre alzaré mis manos[e].
5 Como con médula[f] y grosura está saciada mi alma;
y con labios jubilosos te alaba mi boca.
Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela[c]
cual[d] tierra seca y árida donde no hay agua.
2 Así te contemplaba en el santuario,
para ver tu poder y tu gloria.
3 Porque tu misericordia es mejor que la vida,
mis labios te alabarán.
4 Así te bendeciré mientras viva,
en tu nombre alzaré mis manos[e].
5 Como con médula[f] y grosura está saciada mi alma;
y con labios jubilosos te alaba mi boca.
6 Cuando en mi lecho me acuerdo de ti,
en ti medito durante las vigilias de la noche.
7 Porque tú has sido mi socorro,
y a la sombra de tus alas canto gozoso.
8 A[g] ti se aferra mi alma;
tu diestra me sostiene.
en ti medito durante las vigilias de la noche.
7 Porque tú has sido mi socorro,
y a la sombra de tus alas canto gozoso.
8 A[g] ti se aferra mi alma;
tu diestra me sostiene.
9 Pero los que buscan mi vida[h] para destruirla,
caerán[i] a las profundidades de la tierra.
10 Serán entregados al[j] poder de la espada;
presa[k] serán de las zorras.
11 Mas el rey se regocijará en Dios;
y todo el que por El jura se gloriará,
porque la boca de los que dicen mentiras será cerrada.
caerán[i] a las profundidades de la tierra.
10 Serán entregados al[j] poder de la espada;
presa[k] serán de las zorras.
11 Mas el rey se regocijará en Dios;
y todo el que por El jura se gloriará,
porque la boca de los que dicen mentiras será cerrada.
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
Devocional – Examen
de Honestidad
Publicado por: Pastor Carlos Vargas Valdez en Cristianos, Devocional Cristiano, Devocional Diario, Devocionales, Dios 0
Publicado por: Pastor Carlos Vargas Valdez en Cristianos, Devocional Cristiano, Devocional Diario, Devocionales, Dios 0
Examen de Honestidad
Qué pide el Señor de
ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.
Miqueas 6:8.
Miqueas 6:8.
Procurad lo bueno
delante de todos los hombres. Romanos 12:17.
En el colegio se
hacían muchas trampas. Un día nuestro profesor de matemáticas, antes de
distribuir los cuestionarios, nos dijo: Hoy quiero hacerles dos exámenes: uno
de geometría y otro de honestidad. Espero que aprueben ambos. Si uno les sale
mal, que sea más bien el de geometría. En la carrera de la vida tendrán más
oportunidades de aplicar los principios de honestidad que de utilizar los
teoremas.
De muchas maneras y
de un momento a otro, debemos pasar un examen de honestidad. Por ejemplo, ¿qué
hacemos en el supermercado cuando la cajera se equivoca y nos devuelve más de
la cuenta? ¿Acaso pensamos: «Después de todo es su error, no el nuestro»? Y
cuando completamos la declaración de la renta, ¿omitimos algún ingreso? Quizás
pensamos: nadie lo va a verificar…
Mi profesor tenía
razón. El comportamiento moral de una persona es mucho más importante que el
nivel de sus conocimientos o de sus ganancias. Primero es necesario que seamos
sinceros ante Dios. A él es imposible hacerle trampa, porque “todas las cosas
están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta”
(Hebreos 4:13). Aceptemos hacer nuestras cuentas con él. Es la condición para
que, gracias a la obra de Jesús, Dios perdone la suma de nuestra deuda para con
él. Procuremos “hacer las cosas honradamente, no sólo delante del Señor sino
también delante de los hombres” (2 Corintios 8:21).
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
Devocionales
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
El espejo.
Todos tenemos un
espejo en nuestro hogar y algunos en otros lugares específicos como la cartera
o el auto y bien sabemos cuál es su utilidad, ¿verdad? Lo usamos para vernos
tal cual somos externamente, de la imagen que veamos ahí dependerán nuestras
acciones, por ejemplo: si debemos peinarnos, lavarnos la cara, arreglar el
maquillaje, etc.
Si el espejo permite
que veamos nuestro exterior ¿Qué usamos para ver nuestro interior?
Santiago 1:23-24 dice: “Pues, si escuchas la palabra pero no la obedeces, sería como ver tu cara en un espejo; te ves a ti mismo, luego te alejas y te olvidas cómo eres.” (NTV).
Santiago 1:23-24 dice: “Pues, si escuchas la palabra pero no la obedeces, sería como ver tu cara en un espejo; te ves a ti mismo, luego te alejas y te olvidas cómo eres.” (NTV).
La Biblia es el
espejo que Dios nos dio para poder ver nuestro interior, los pensamientos,
sentimientos y el corazón ¿no te ha pasado? Que cuando meditas en su palabra
encuentras versos que te hablan directamente a ti, algunos de esos versículos
te confortan, otros te advierten y te examinan; y al igual que hacemos luego de
vernos en el espejo (arreglarnos), de la misma manera debemos hacer cuando
conocemos nuestro interior, debemos corregirnos, aprender y mejorar aquello en
lo que hemos estado fallando.
No podemos andar como
necios, creyendo que todo lo que hacemos y pensamos es correcto y justo “No te
dejes impresionar por tu propia sabiduría. En cambio, teme al Señor y aléjate
del mal” Proverbios 3:7 (NTV).
La Biblia es el
espejo que nos muestra el reflejo más honesto de nuestra propia vida, pero
también es importante y vital tomar acciones frente a lo que vemos, pues no
somos perfectos. El rey David, un hombre “Conforme al corazón de Dios”, dijo:
“Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce los pensamientos
que me inquietan. Señálame cualquier cosa en mí que te ofenda y guíame por el
camino de la vida eterna” Salmos 139:23-24 (NTV) Este rey estaba reconociendo
que podría estar equivocado, por ello le pidió que lo examine y lo corrija.
Es de humanos
equivocarse, pero es de sabios ver el error y corregir; no hay nada más certero
y valedero que la biblia para corregirnos, no te limites a quedarte con lo que
tú piensas que es correcto, examínate a la luz de su Palabra y serás aún más
sabio.
Judith Quisbert
CVCLAVOZ
CVCLAVOZ
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