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UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
2 Timoteo 4:8 La Biblia de las Américas
Comisión a Timoteo
4 Te encargo solemnemente, en la presencia de Dios y de
Cristo Jesús, que ha de juzgar a los vivos y a los muertos, por su
manifestación y por su reino: 2 Predica la palabra; insiste a
tiempo y fuera de
tiempo; redarguye, reprende, exhorta con mucha[a] paciencia e instrucción. 3 Porque vendrá
tiempo cuando no soportarán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de
oídos, acumularán para sí maestros conforme a sus propios deseos; 4 y apartarán sus oídos de la
verdad, y se volverán a mitos[b]. 5 Pero tú, sé sobrio en todas las cosas,
sufre penalidades, haz el trabajo de un evangelista, cumple tu ministerio. 6 Porque yo ya estoy para ser
derramado como una ofrenda de libación, y el tiempo de mi partida ha llegado. 7 He peleado la buena batalla,
he terminado la carrera, he guardado la fe. 8 En el futuro me está
reservada la corona de justicia que el Señor, el Juez justo, me
entregará en aquel día; y no solo a mí, sino también a todos los que
aman su venida[c].
UN ENCUENTRO CON LA PALABRA
REFLEXION
¿Te gustan las cosas exclusivas?
Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ
Ciertamente,
a la mayoría nos gustan las cosas exclusivas. Especialmente en una relación
amorosa nos gusta tener exclusividad. Significa fidelidad. ¿Cierto? Pero, por
otra parte, si respondiste que sí te gusta tener exclusividad, ¿le das
exclusividad a Dios?
Lo pregunto, porque muchas veces no nos damos cuenta de que
tenemos a Dios en un lugar que no está a Su altura. El Creador del Universo que
fue quien te dio vida, ¿acaso no merece el primer lugar en tu vida, y
exclusividad en adoración?
¿A quién adoras?
Analiza si no estás adorando a otra persona, sea tu pareja tu
hija, hijo o peor aún tu casa o tu auto, tu calzado, tu ropa, tu reloj. Debemos
adorar a Dios en exclusividad. No hacer de otras personas y menos de otras
cosas un dios. ¡Es uno de los Mandamientos!
No te hagas ninguna clase de ídolo ni imagen de ninguna cosa que
está en los cielos, en la tierra o en el mar.
Éxodo 20:4 (NTV).
Sí, nuestro Dios definitivamente es de exclusividad. A Él le
gusta, y nos pide que tengamos exclusividad con Él en ese mandamiento, y luego
cuando vino como hombre a sacrificarse por nosotros. Nos dijo que nadie llega
al Padre sino a través de Él.
Jesús le contestó: —Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie
puede ir al Padre si no es por medio de mí.
Juan 14:6 (NTV).
No hay excusas para no darle a Dios la exclusividad
Dios no necesita ayudantes ni nosotros intercesores para
comunicarnos con Él. Es tan grandioso que nos dio acceso directo para hablarle.
Cuando Jesús murió y leemos en la Escritura que se rompió el velo del
Santísimo, se abrió la comunicación directa para nosotros con Dios.
Entonces Jesús volvió a gritar y entregó su espíritu. En ese
momento, la cortina del santuario del templo se rasgó en dos, de arriba abajo.
La tierra tembló, las rocas se partieron en dos, y las tumbas se abrieron.
Mateo 27:50-52 (NTV).
Fue todo un acontecimiento Su muerte, para abrir los ojos a
quienes le habían deseado esa muerte; y más grandiosa aun, Su resurrección, que
nos da la esperanza de volverlo a ver en ese lugar que dijo que va a preparar
para nosotros, para poder pasar la eternidad con Él. Fue una promesa y Él
siempre ha cumplido Sus promesas.
No dejen que el corazón se les llene de angustia; confíen en
Dios y confíen también en mí. En el hogar de mi Padre, hay lugar más que
suficiente. Si no fuera así, ¿acaso les habría dicho que voy a prepararles un
lugar? Cuando todo esté listo, volveré para llevarlos, para que siempre estén
conmigo donde yo estoy.
Juan 14:1-3 (NTV).
Yo no sé tú, pero yo, estoy fascinada con tener un Dios que
quiere exclusividad y pasar la eternidad conmigo. Prefiero tenerlo de exclusivo
en mi vida, ser fan de Él, que nos ama tan sin igualmente, que, de otro humano
como yo, que cometemos tantas faltas y fallamos en tantas cosas. ¿Tú? ¿Sabes si
vas a pasar la eternidad con Jesús? Si no lo sabes, escríbenos, por favor.
Elluz Peraza
CVCLAVOZ
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